jueves, 24 de enero de 2013

Edgar Morín


La mundialización se inició con el «cuatrimotor» formado por la ciencia, la técnica, la economía y el beneficio. Y desde hace 20 años ha entrado en una nueva fase: la globalización, que tiende a unificar al planeta entero desde el punto de vista económico y de los medios de comunicación. Pero este mundo unificado se ha quedado sin bases políticas que lo regulen. El mundo actual está amenazado de destrucción bajo el efecto de crisis múltiples -ecológicas, financieras, económicas, sociales, demográficas- que pueden entrelazarse para formar una «policrisis». Este es el diagnóstico que el filósofo y sociólogo francés Edgar Morin (1921) dibuja en la introducción de su obra "La vía". «Cuando un sistema es incapaz de tratar sus problemas vitales, se degrada, se desintegra, o bien consigue regenerarse, crear un metasistema para tratar sus problemas: se metamorfosea». Morin diseña los contornos de esta metamorfosis indicando los mil y un senderos que pueden conducir a esta transformación global. El libro es más bien un proyecto «antropolítico»: una política de civilización. Esta política pasa por una regeneración de la política, de la economía y de la educación. Pero también por una transformación masiva de nuestra forma de concebir la medicina, el hábitat, la alimentación, el trabajo y el consumo. Este cambio de civilización traerá por sí mismo una reforma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

What do you thing?